En el caso de la silla debemos tener en cuenta:
1. REPOSACABEZAS. Para evitar tensiones musculares.
2. RESPALDO. Debe tener un ancho y alto su ficiente para un buen reposo y una correcta posición de la espalda. Además, debe de ser regulable con un buen apoyo lumbar. Debe de estar acolchado.
3. REPOSABRAZOS. Para mantener los brazos en una posición óptima que permita tener los brazos en 90º , deben de ser adaptables y evitar la presión de los hombros.
4. ASIENTO. Debe ser amplio, con una profundidad adecuada para poder sentarnos en el centro de la silla y que nos sobre espacio a los lados. Además, debemos evitar que la parte de atrás de las rodillas toque el asiento. Los bordes han de estar redondeados. También tiene que estar acolchado ya que pasaremos muchas horas encima.
5. BARRA UNIÓN. Esta barra a de ser ajustable a la altura que el usuario deseé. Además, de ser giratoria para mejorar la interacción con el espacio de o ficina.
6. PATAS. Para un buen apoyo, es principal que la silla tenga cinco patas con ruedas para facilitar el movimiento por la o ficina. El tapizado de la parte del respaldo y el asiento ha de ser transpirable y resistente. Para la elección del mobiliario de la o ficina prevalecerá la comodidad por encima de la
estética ya que queremos evitar a toda costa algún tipo lesión o posible dolor que nos pueda ocasionar cualquier asiento innadecuado. Para esta elección es posible que necesite del asesoramiento de un profesional que pueda aconsejarle la mejor opción dentro de sus posibilidades económicas y
llegar a una tipología de mobiliario que se adapte a su bolsillo y a su vez no sea perjudicial para su salud. Mejorando el rendimiento.
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